Por: Félix Rivera Méndez
CORRESPONSAL – LA PRENSA / JINOTEGA
Mons. Carlos Enrique Herrera | Obispo de Jinotega
El Obispo de la Diócesis de Jinotega, Carlos Enrique Herrera Gutiérrez, pidió al Gobierno de Daniel Ortega “diálogo nacional, respeto a la democracia y cese de la incertidumbre, para unidos como nicaragüenses poder sacar adelante al país, como lo hizo el Siervo Odorico D’Andrea”.
Herrera brindó declaraciones en su residencia-despacho de la casa parroquial de esa ciudad, en víspera de los preparativos del Veinte Aniversario del querido y venerado sacerdote, Odorico D’Andrea, quien dejó sus comodidades en su natal Téramo, Montorio, Italia y vino al país a impulsar obras de progreso en San Rafael del Norte, Yalí y La Concordia, desde 1954 hasta su muerte el 22 de marzo de 1990.
A D’Andrea, en proceso de canonización y beatificación, se le atribuyen grandes milagros y fue un servidor humilde que en medio de la guerra de los años ochenta hizo que aquellos hombres barbudos y flacos, que se mataban a balazos, (miembros del entonces Ejército Popular Sandinista o EPS y la Contra) se abrazaran y se dieran la mano aquel 3 de mayo de 1988, en la comunidad La Naranjita, entre Yalí y San Rafael del Norte.
“En este momento se respira en el ambiente una situación de incertidumbre, es el momento que cada uno de nosotros tenemos que aportar unidad al bien común y encaminarnos a una verdadera democracia y una unidad que comience por nuestros familiares desde los valores cristianos”, pidió.
El Obispo de Jinotega dijo que “la Iglesia católica estaría anuente a servir de garante y mediadora en un diálogo nacional, que conlleve a alcanzar esa unidad de nación y el bien común desde los valores patrióticos, tal como lo hizo Odorico D’Andrea que acompañó al pueblo en esos años difíciles de la guerra”.
Monseñor Herrera señaló que “el siervo Odorico fue un protagonista de la paz en Nicaragua y desde el cielo, él nos está vigilando. Hoy en día estamos rompiendo esa paz que se logró. Hay muchas divisiones político-partidista, lo que no conlleva al desarrollo y no hay unidad y las fuerzas desunidas se diluyen en discusiones y no trabajan por el bien común”.
“El Gobierno debe abrirse al diálogo nacional, que escuchen las voces no sólo de los políticos, sino de la sociedad y que escuche las voces que claman por una verdadera democracia. La Iglesia católica está dispuesta a apoyar, participar y mediar en el diálogo”, explicó el Obispo de Jinotega.
Sobre el proceso de canonización de D’Andrea, el Obispo reveló que ya han reunido veinticinco testimonios, incluyendo uno del sacerdote franciscano Domingo Pepe, y el ex vicario de la Diócesis de Jinotega, padre Douglas Araica, así como de campesinos que el padre Odorico curó e hizo milagros.
Herrera dijo que todos esos testimonios serán certificados con un dictamen médico-legal para ser enviados a Roma y calculó que “a como van las cosas, la beatificación del fraile puede estar cerca, en menos de diez años”.
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